Ama a tus enemigos (comparta tus juguetes)
Cita: Benditos son aquellos que tienen el don de hacer amigos, porque es uno
de los mejores regalos de Dios. Esto incluye muchas cosas, pero sobre todo, el
poder de salir lo de uno mismo, y apreciar cualquier cosa que sea noble y
amable en el otro. – Thomas Hughes
Texto: Lucas 6:27-36
Objeto: El juguete de un niño o una lámina de La regla de oro.
Resumen: La regla de oro – Todo lo que hagan por ti, hazlo por ellos.
¿Miren el juguete que traje hoy? A mi me gusta jugar con juguetes. ¿Les gusta
jugar con juguetes? [Escucha respuestas.] Déjenme preguntarles algo.
¿Comparten sus juguetes como sus amigos? [Escucha respuestas] Déjame
preguntarles algo diferente. Si hay una niña/o nuevo en su clase, ¿compartirían
los juguetes con alguien que no conocen bien? Ahora realmente se pone más
difícil. ¿Qué si es una clase intimidante, aquel que trata de sacarte los juguetes
nuevos sin siquiera preguntarles ¿los compartirían con el/ella? [escucha
respuestas] Ahora dejenme hacerles una pregunta más. ¿Qué haría Jesús?
Leamos la Biblia para averiguarlo.
[Lea en voz alta Lucas 6:27-36]
Muchas veces en la Biblia aprendemos que Dios nos ama a todos, incluso a
aquellos que son malos y desagradecidos. Jesús nos enseñó una clase de
amor radical. Él dijo Ama a tus enemigos. Él dijo que habría una recompensa
en el cielo si amamos a aquellos que nos odian. Si prestamos nuestros
juguetes o algo que es importante para nosotros, sin esperar nada a cambio,
estamos haciéndolo lo que Jesús haría. Él nos enseñó lo que es conocido
como la “Regla de oro”. Él dijo cualquier cosa que queramos que hagan por
nosotros, eso es lo que deberíamos hacer por ellos. Si actuamos desde el
corazón lleno de amor, incluso con aquellos que nos odian, podemos hacer del
mundo un lugar mejor para vivir.
Si sólo compartimos nuestros juguetes con nuestros amigos, estamos haciendo
lo que nadie más haría. No hay nada especial en eso. Para ser más como
Jesús, tenemos que aprender a amar lo indeseado. Tenemos que aprender a
tratar a nuestros enemigos como quisiéramos ser tratados. Eso es realmente
difícil, pero es posible. Algunas veces cuando hacemos esto, lo malo en ellos
podría dar lugar a un corazón más amable y podría no ser tan malo.
Aprendamos a amar a todos y a compartir nuestros juguetes.
©1998 por Jim Kerlin. Todos los derechos reservados.
Visitas: 2