“Simn, hijo de Jons, me amas? Pedro le respondi: S, Seor; t sabes que te amo” (Juan 21:16).
“Sin convivencia no hay amor”.
Dando un paseo por antiguas citaciones, depareime con a que aparece arriba. Me qued meditando en eso por algunos segundos y concuerdo que es la pura verdad. La teora del “amor a primera vista” es bastante discutible. Puede haber pasin, deseo y cosas semejantes, pero amor depende ms de lo que una primera vista.
Como hago con todo cuanto leo, empec a pensar en eso en relacin a nuestra vida con Dios. Nosotros Lo amamos cuando pasamos la vida a Su lado. Amamos Su Palabra cuando en ella reflexionamos constantemente. Amamos seguir Sus consejos cuando les practicamos todos los das. Es nuestra convivencia con el Seor que nos lleva a amarlo, cada vez ms.
Amamos ir a la casa del Seor cuando estamos siempre all. Amamos participar de los programas de la iglesia cuando estamos acostumbrados a decir, “puede contar conmigo”. Amamos or la Palabra predicada cuando buscamos aplicarla a nuestros das, tan pronto como dejamos la reunin. Amar a Dios es convivir con l y lo convivir con l es el combustible para que Lo amemos ms y ms.
Su amor al Seor fue apenas pasajero, por una primera experiencia, o es definitivo, por la convivencia diaria con l?
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