Tenemos que oler a oveja como Jess
Hace varios aos
asist al servicio de ordenacin de un amigo mo compaero en el Seminario Teolgico
de Dallas. Tanto l como su familia son chilenos y su pap fue el encargado de
dar el mensaje durante el servicio. Sus padres son misioneros en Mxico y
viajaron a Dallas para participar en la ordenacin. El mensaje fue sencillo y
se ha quedado en mi memoria como uno de los mejores ejemplos del ministerio
cristiano. Su padre le record a su hijo que como pastor su funcin principal
sera estar al lado de sus ovejas y que, como resultado de su interaccin con
ellas, inevitablemente olera a oveja. Las ovejas tienen un olor caracterstico
y al convivir con ellas su olor se impregna y se vuelve parte del pastor. Su
pap le record a mi amigo, y a la vez a todos nosotros, que si no ola a oveja
esto significaba que no estaba siendo fiel a su llamado. Aunque predicar y
ensear son parte del trabajo pastoral, guiar y estar con las ovejas es
esencial para ser un buen pastor.A lo largo de los aos he comprobado que el ministerio cristiano sera muy
fcil si no fuera por la gente. De hecho, no se puede trabajar con gente sin
darse cuenta que todos desprendemos un olor especial que refleja
nuestras debilidades, temores y defectos. Nadie es perfecto y solamente basta
convivir con otros para comprobar que todos somos pecadores con una gran
necesidad de gracia. Sin embargo, aunque se puede impresionar a la gente a la
distancia, solamente se puede impactarlos cuando se est cerca.
Nuestro Seor Jesucristo nos ha dado el mximo ejemplo de lo que significa
servir a los dems. Juan, uno de sus discpulos ms cercanos, nos relata cmo
fue impactado por su cercana con Jess. Su evangelio inicia con la descripcin
del Creador del universo fuente de todo lo que existe:
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era
Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por l fueron hechas,
y sin l nada de lo que ha sido hecho, fue hecho (Juan 1:1-3).
Jess es Dios y la fuente de todo lo que existe. Sin embargo, Juan resalta que
Dios hizo su morada entre los hombres: Y aquel Verbo fue hecho carne, y
habit entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre),
lleno de gracia y de verdad (Juan 1:14). Jess era tan personal que no le
import ser conocido por sus discpulos y convivir con la humanidad como uno de
ellos.
La grata impresin que Jess dej en Juan fue tan grande que en su primera
carta reitera su cercana con el Seor todopoderoso. Note especialmente como
Juan enfatiza de que manera sus sentidos tuvieron contacto con Jess:
Lo que era desde el principio, lo que hemos odo, lo que hemos visto con
nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al
Verbo de vida (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y
testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se
nos manifest); lo que hemos visto y odo, eso os anunciamos, para que tambin
vosotros tengis comunin con nosotros; y nuestra comunin verdaderamente es
con el Padre, y con su Hijo Jesucristo (1 Juan 1:1-3)
Si alguien tena derecho a permanecer alejado de los pecadores era Jess. Jess
poda perfectamente decidir no acercarse a los dems para contaminarse con su
olor. No obstante, Jess se hizo hombre y habit entre nosotros de
una manera tan cercana que Juan pudo verlo, orlo y tocarlo. Nosotros como
seguidores de Jess debemos hacer lo mismo con nuestros semejantes. Un buen
discpulo de Jess es aquel que huele a oveja y de esta manera
refleja a Cristo.
Hace aos que aprend la importancia de oler a oveja. No es fcil, pero no
existe otra opcin para realmente ministrar a los dems y seguir el ejemplo del
Maestro. Y cmo est su olor?
Discover more from Ministerio Infantil Arcoíris
Subscribe to get the latest posts sent to your email.