Seguridad Mxima

Seguridad Mxima

“En paz me acostar, y asimismo dormir; Porque solo t,

Seor, me haces vivir en seguridad”(Salmos 4:8).

Una historia verdadera: Una pareja jubilada estaba alarmada

por la amenaza de guerra y armas nucleares. Por ese motivo,

emprendieron un estudio serio sobre todos los lugares

habitados en el globo. Su objetivo era encontrar el lugar

menos probable de ser alcanzado por la devastacin causada
por guerras y destruccin nuclear. Ellos almejavam encontrar

un local de seguridad mxima. Entonces la pareja estudi y

viaj, viaj y estudi. Finalmente encontraron el lugar.

Hicieron los planes y vendieron su casa. Organizaron su

pertenencias y viajaram. En la Navidad de 1981, enviaron a

su pastor una tarjeta de su nueva casa. Tres meses ms

tarde, el pastor estaba orando por su seguridad. La casa de

ellos se quedaba en las Islas Falkland. El lugar fue

invadido por las tropas argentinas el 2 de abril de 1982.

El mundo en el que vivimos ofrece muchos engaos y peligros.

Solo hay un lugar verdaderamente seguro para nosotros: en la

presencia del Seor. All no hay engaos, no hay discordias,

no hay alevosas, no hay dudas y ni incertidumbres. En la

presencia del Seor hay vida, hay paz, hay esperanza, hay

amor y comprensin. l nos abriga y protege, nos consola y

anima, nos conduce por Campos verdes y aguas tranquilas de

descanso.

Cuando las luchas y disensiones nos cercan, l nos reviste

de Su amor. Cuando las aflicciones intentan nos alcanzar, l

nos reviste de esperanza y fe. Cuando la muerte se aproxima,

l nos reviste de vida abundante y eterna.

Si anhelamos, como aquella pareja americana, habitar en

perfecta seguridad, no necesitamos hacer grandes estudios y

ni muchos viajes. Basta que nos presentemos delante del

trono de Dios y convidemos Cristo a entrar en nuestros

corazones. Donde estemos, l Estar tambin y, donde l

est, la seguridad es mxima… siempre!