“No con ejrcito, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho el Seor de los ejrcitos” (Zacaras 4:6).
“La fuerza conquista todo, pero sus victorias son de corta duracin”. (Abraham Lincoln)
La nica fuerza que promueve victorias garantizadas que durarn para siempre es la que proviene del gozo del Seor. Con Cristo en nuestros corazones somos fuertes para vencer el mal y conquistar todos nuestros sueos.
De qu sirve una victoria ilusoria que pronto se convertir en desilusin y frustracin? De qu sirve un logro que no servir? De qu sirve ganar el mundo entero y perder tu alma? Solo las victorias obtenidas bajo la direccin de nuestro Salvador Jesucristo nos acompaarn durante toda nuestra vida y luego durante toda la eternidad.
Las principales batallas de la vida no se ganan con nuestra fuerza o nuestra capacidad intelectual. Dependen de nuestro compromiso y relacin con Dios. Y cuando los superemos, entonces la alegra ser verdadera y nuestra alegra se extender a todos.
Quieres tener una vida victoriosa? Deja que Cristo las conquiste por ti.
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