“De modo que si alguno est en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aqu todas son hechas nuevas” (2 Corintios 5:17).
Una nia pequea dijo a una pequea amiga: “Nuestros padres son tan grandes que no podemos cambiar sus hbitos”.
Al pensar en lo que dijo esa nia, alabamos a Dios, porque l puede cambiar nuestros hbitos a cualquier edad. Si recibimos a Jess como Seor y Salvador en nuestra juventud, todos nuestros pecados son perdonados y nuestras vidas se transforman. Si lo recibimos cuando somos viejos, l tambin perdona nuestros pecados y transforma nuestras vidas. El Seor cambia nuestras costumbres cada vez que nos presentamos a l.
Ya hemos escuchado maravillosos testimonios de personas que dijeron: “Yo era as…”, “Era adicto a las drogas y Jess me ha amado…”, “Era rebelde y mentiroso…” Y el Seor, con mucho amor y afecto, no solo cambia nuestros hbitos sino que olvida nuestros defectos para siempre.
Es cierto que la Iglesia no cambia nuestras vidas, ni el pastor, ni el sacerdote, ni nadie ms. Quien cambia nuestras vidas es el Seor Jess. l solo es el Seor y solo l nos conduce al Cielo y a la vida eterna.
He sido transformado por Cristo cuando tena 21 aos. Aleluya! Y nunca volv atrs! Aleluya! Has experimentado una bendicin tan grande?
Discover more from Ministerio Infantil Arcoíris
Subscribe to get the latest posts sent to your email.