“… porque no hay verdad en l. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira” (Juan 8:44).
El pecado de los padres, casi siempre, afecta a los hijos. El libro de Gnesis lo muestra claramente: el pecado de mentir sigui a Abraham, Isaac, Jacob y Jos.
Qu ejemplo estamos dejando para nuestros hijos? Y para nuestros hermanos? Y para nuestros colegas en el trabajo? Y para nuestros vecinos? Debemos tener el entendimiento de que estamos en el mundo para brillar, para ser un ejemplo, para dar testimonio de una vida transformada por el poder de Dios. Somos representantes del Seor en la tierra y necesitamos glorificar y magnificar su nombre.
La mentira ha sido un virus que se propaga por todas partes, por todos los entornos, por todos los sectores de la sociedad. Incluso no creamos en nada ms . en nadie ms. La moda de “fake news” ha llegado a muchos y esto ha proporcionado inseguridad incluso para aquellos que tienen como regla la verdad, la santidad, la vida con Dios.
Cuando la iglesia comezar a preocuparse por el testimonio cristiano, entonces el mundo ser mejor, la alegra ser mayor, el pecado perder su potencial y el reino de Dios tendr sus tiendas expandidas y muchos encontrarn la verdadera felicidad.
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