Un hombre de negocios, lder de su iglesia, haba tenido mucho xito en su negocio, pero finalmente fracas en una importante empresa comercial. Le dijo al pastor: “Me alegro de haber fallado porque me estaba alejando de Dios”.
Cul es nuestra prioridad en la vida? Tener xito, hacernos muy ricos o tener una vida en la presencia de Dios? Lo ideal es tener los tres al mismo tiempo, pero esto ni siempre es posible. Por eso debemos tener una prioridad. Y ese hombre de negocios entendi que la mejor parte era el Seor.
Cuando elegimos dejar al Seor para que nos ocupemos del xito, la fama, la riqueza o cualquier otra cosa, cuando perdemos todo, nos quedamos sin nada. Cuando elegimos al Seor, no importa cuntos fracasos, Dios siempre nos levantar y podremos empezar de nuevo. La gran bendicin es el Seor y no el gran xito que anhelamos.
Dios es siempre la parte buena, la mejor parte.
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