“Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temer mal alguno, porque t estars conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirn aliento” (Salmos 23:4).
“Mi vida espiritual ha sido un fracaso”, deca un joven a otro, con semblante angustiado. El amigo le dijo: “Creo que has sido demasiado cuidadoso . en el malo sentido”. El primero, sin entender, pidi explicaciones. “Es que, tal vez por temor de perder a Jess en su trabajo o en la universidad donde estudia, no Lo ha llevado, se queda guardado en la iglesia.”
Dnde hemos dejado a Jess? Hemos guardado nuestro Seor como un tesoro, slo para nosotros o hemos tenido el gran placer de llevarlo a todos los lugares donde vamos? Con l en el corazn, tenemos la libertad de ir a cualquier lugar. l es nuestro Compaero, nuestro mejor Amigo, nuestro Gua y conductor por los caminos de la vida abundante y eterna. Sin l no somos nada y nuestro brillo caracterstico desaparece.
Cuando Jess es Seor de nuestras vidas, de verdad y no slo de nombre, entonces nuestro semblante muestra una sonrisa que no se deshace, nuestras actitudes demuestran que l est presente, independiente de las circunstancias, nuestros amigos perciben que somos diferentes de aquellos que no Lo llevan consigo.
Con Jess nuestras vidas nunca sern un fracaso. En el sol o la lluvia, siempre estaremos cantando, siempre tendremos una palabra positiva para compartir, nunca necesitaremos correr en busca de bendiciones, porque la mayor bendicin ya estar en nosotros.
Desea continuar de la mano con la angustia o ya la expuls, cargando slo la felicidad de la presencia de Jess?
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