Raíces Fuertes – Devocionales para Niños
EL AGUACATE
Paciencia para la madurez
Versículo Clave:
“El fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio.” — Gálatas 5:22-23 (TLA)
El aguacate es un árbol perenne y fuerte que mantiene sus hojas verdes. Lo más curioso es su fruto: no se ablanda ni madura mientras está pegado al árbol. Debe ser cortado y separado de la rama para que empiece el proceso de maduración. Esto permite a los agricultores guardarlo en el árbol, usando su fuerza como una nevera natural.
Nuestra fe en Dios es como el aguacate: la madurez, el buen fruto, muchas veces no llega mientras estamos en nuestra zona de confort. Dios nos permite pasar por “pruebas”: separarnos de la comodidad, para que la paciencia y otros frutos del Espíritu se ablanden y maduren en nosotros. Las raíces de la fe nos mantienen firmes, pero la madurez se da cuando confiamos en Dios durante la espera.
Oración Final:
Amado Dios, gracias por Tu paciencia con nosotros. Ayúdanos a ser pacientes y a madurar los buenos frutos de Tu Espíritu. Amén.
¡Conecta-T con el Salmo 1:3!:
Espera un minuto antes de tomar tu siguiente bocadillo o juguete. ¡Practica la paciencia y recuerda que el buen fruto necesita tiempo!
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Ministerio Infantil Arcoíris
“No somos un ministerio grande…
…pero sí somos un gran ministerio”
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