Aqu van una serie de diez consejos prcticos para la enseanza infantil, especialmente pensados para maestros y ayudantes de Escuela Dominical. De hecho los hemos utilizado en un retiro de maestros a fines del ao 2001, siendo de mucho provecho… espero que tambin les resulten tiles.
Una clase no es una predicacin.
La clase no debe ser unidireccional, del tipo sermn, salvo excepciones. Hay que aprovechar los beneficios de los grupos pequeos. Se pueden evitar algunas repeticiones que se realizan en las prdicas generales, se pueden utilizar recursos que son imposibles de aplicar en las prdicas.
El perfecto orden no significa una gran atencin.
No hay que engaarse: que haya silencio y que los nios estn inmviles no significa que estn comprendiendo… ni an escuchando lo que estamos diciendo. Por el contrario, puede ocurrir que en medio de un desorden controlado haya mas receptividad por parte del educando.
Haga preguntas interesantes, especficas y claras.
Debe quedar muy claro lo que preguntamos, y debemos hacerlo de tal manera que sea interesante responder, generando un clima de confianza. A veces es bueno utilizar la polmica pues incita a la participacin. No son muy tiles las preguntas con respuestas poco especficas (y a ustedes que les parece?), la preguntas con respuestas del tipo si-no (Se portaron bien durante la semana? Entendieron lo que les expliqu?), las preguntas con respuestas obvias (les gustan las cosas feas?, de que color es el caballo blanco de San Martn?), las preguntas que no estn en capacidad de responder (Qu fecha (da, mes, ao) se culmin la traduccin de Casidoro de Reina?).
Sea seguro.
Prepare la clase y expngala con conviccin, si no la tiene, bsquela de Dios. La falsa humildad hace que a veces- busquemos la aprobacin o apoyo de otros maestros presentes, esto hace que se pierda la atencin, o que el maestro que no conoce la clase preparada desve el tema (Vamos a preguntarle al maestro ….. que le parece…).
No opine sobre lo que no sabe (sea humilde)
Si algo no lo sabemos, admitmoslo honrosamente pero comprometmonos a averiguarlo. En la clase siguiente traeremos la respuesta, pero la expondremos de una forma interesante y completa, despertando el inters pues es posible que los nios ya hayan perdido la motivacin.
Viva lo que ensea.
Trate de evitar temas que an no ha alcanzado, no exija mas de lo que se exige a si mismo.
Aburrir casi es un pecado.
El maestro debe hacer todos los esfuerzos posibles para no aburrir a sus alumnos. Utilice todos los recursos que tiene a mano. Recuerde que lo importante es que la enseanza llegue, no que la clase se de tal cual la prepar.
Conozca a sus alumnos.
Involcrese con sus alumnos. Conozca sus caractersicas, necesidades, intereses (hobbies, deportes favoritos, gustos varios), amistades, conformacin familiar; tanto del grupo en general como de cada alumno en particular. Conocer el grupo har que aprovechemos sus caractersticas en el momento de ensear. Ejemplo: si es un grupo que le gustan lo juegos de destreza fsica, puede utilizar alguna introduccin en ese sentido; si por el contrario, son mas intelectuales, podr utilizar juegos de ingenio, o un video.
Conozca a sus compaeros maestros.
Es necesario saber como pensamos para que la clase apunte para un mismo lado. El conocimiento mutuo nos va a enriquecer mucho. Tambin ser un gran testimonio para los alumnos ver el amor que se tienen los maestros. Por ltimo, si ya hemos formado un criterio comn, ser una imagen hermosa que daremos a los chicos, pues ya se a que pregunten a un maestro o a otro, la repuesta ser muy parecida.
Pida a Dios el crecimiento.
No olvide que nosotros sembramos o regamos, pero el crecimiento lo da Dios. No desespere si las cosas no cambian, pero ocupe tiempo en la oracin por cada uno de sus alumnos.