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“No somos un ministerio grande, pero sí somos un gran ministerio”

Clases bblicas para los nios preescolares

Clases bblicas
para los nios preescolares

 

 

 

El infante
Los nios de dos y
de tres aos

 

Los nios de cuatro y
de cinco aos

 

 

Ensearles a escuchar

 

 

Ensearles la Biblia

 

 

No vaya en contra del
nivel de madurez

 

 

Ayudas en la enseanza

 

 

Trabajando en grupos

 

 

Un plan de lección
propuesto
En algn momento, un beb madura lo suficiente como para dejar el cuidado de su madre e ir a una clase. No hay fecha exacta del calendario que corresponda a todos los nios, pero las maestras han de ser ms que nieras. Madre, si su beb no est listo todava para ir a aprender con un grupo, por favor, tngalo consigo por unas semanas o meses ms. Usted no le est condenando a una vida de ignorancia por esperar un tiempo ms. Si usted est haciendo su propio trabajo correctamente, su beb ya se estar enseando de manera que l pueda ir entendiendo mejor.

Las clases para los ms pequeos son de las ms difciles de ensear. Muy a menudo, a las maestras jvenes y sin experiencia se les dan estas clases porque los hombres consideran estas clases como las de menos valor. Tal prctica es un equvoco grave. A menos que la maestra sea excepcionalmente creativa en su trabajo con los nios, pues podra llegar a desanimarse con su tarea, y los nios no estaran aprendiendo nada. Los nios ms pequeos pueden aprender una cantidad sorprendente de informacin si el material se les presenta de acuerdo a su nivel de comprensin. Se necesitan urgentemente maestras dedicadas que amen a este grupo.

Las madres de los nios de esta clase son las mejores maestras para los de esta edad. Los bebs y las madres estn tan unidos que no quieren separarse por mucho tiempo. El nio de usted ser ms feliz que nunca si le toca a usted ensear la clase. Y usted no debe temer que esto destruya el deseo de l de ir a su clase cuando el turno de usted termine. Aun si l lloriquea un poco el primer da con otra maestra, pronto podr entender que es el turno de Juanito tener a su madre en la clase ahora. Las madres de los preescolares estn ms al tanto del vocabulario y nivel de madurez exactos de los nios, que aquellas hermanas cuyos hijos ya han pasado de este perodo a vocabularios y niveles de madurez ms avanzados.

La mayora de los preescolares se sienten ms cmodos con una mujer que con un hombre, porque estn asociados ms estrechamente con sus madres que con sus padres durante este tiempo. El padre podra estar fuera del hogar ms horas trabajando. Un nio de dos aos podra tener miedo si llegara a la puerta de su saln de clases alguna maana y encontrara all a un hombre, aunque fuera buen amigo de l bajo otras circunstancias.

 

El infante

 

El infante recin nacido est aprendiendo ms rpidamente que en cualquier otro tiempo de su vida. Tiene que aprender toda habilidad conocida por el hombre, desde enfocar los ojos a erguir la cabeza. No hay duda en cuanto a si un beb puede aprender, pero hay maneras nicas por las cuales un pequeo beb aprende. Ensear a un recin nacido y ensear a un adulto son dos cosas muy, pero muy, diferentes. Hemos dicho que los bebs pueden aprender aun las historias bblicas desde su ms temprana edad de la cual puedan tener conciencia, y hemos animado a los padres para que despierten y tomen la responsabilidad de ensear a sus bebs. Puesto que los bebs aprenden por medio de la repeticin y la experiencia, les toca a los padres (o a quienes pagamos por tenerlos bajo su cuidado en las guarderas) quienes estn con ellos regularmente para proveer una verdadera enseanza.

Como tambin dijimos en aquel captulo, no es un error tener una clase para infantes en el sitio de reunin de la iglesia, pero ese no es el sitio donde la mayor parte del aprendizaje ocurre. Si hay tal clase, las maestras y las madres deben trabajar muy juntas para que canten los mismos coritos y cuenten las mismas historias sencillas una y otra vez durante la semana.

Algunos creen fuertemente que los bebs deben llevarse a la clase tan pronto que puedan erguir la cabeza, para que aprendan desde el principio de qu se trata una clase. S, queremos que nuestros bebs aprendan que ellos tienen parte en las actividades en el sitio de reunin de la iglesia; por eso, la clase pequea puede tener valor, pero la maestra debe darse cuenta de que est trabajando coninfantes, no adultos en miniatura, ni siquiera nios del cuarto grado en miniatura. Debe adaptar toda la instruccin al nivel ms sencillo, y ella debe saber que habr das cuando cierto beb no estar disponible para la clase. Si el beb est dormido, entonces deje que duerma, porque el valor que recibir de la siesta es mayor que el valor que recibira de la clase si lo despertaran. Si tiene hambre, no escuchar ninguna clase de historia o corito que lo separe de su bibern. Si est pasando por un tiempo en que no quiere que su mam est fuera de su vista, llorar si la maestra le lleva a otro cuarto y cierra la puerta. Las fases de la vida del beb pasan rpido y todas son parte del proceso de crecimiento.

Por lo tanto, si las circunstancias donde usted asiste parecen justificar tener una clase para los bebs de menos de dos aos de edad, entonces que tal clase se lleve a cabo. Que la maestra prepare unas pocas y sencillas historias que contar y volver a contar. Que prepare unos muy sencillos coritos que ella cantar a los nios varias veces cada semana. Que ella se d cuenta de que slo ella hablar y cantar, porque estos son bebs que no pueden responder verbalmente. Son necesarios muchos ademanes en los coritos, porque los bebs aprenden a imitar los ademanes mucho antes de poder repetir las palabras. Cuente las historias usando las mismas frases sencillas cada vez, porque la repeticin es la nica manera de ensear a los de esta edad. Acte su historia en una forma muy sencilla, usando la misma mmica cada vez que cuente esa historia en particular. Tenga como ayudas de enseanza algunos modelos muy sencillos y de colores brillantes que ellos puedan ver tanto como tocar, pero recuerde que estos sonbebs, as que, asegrese de que sus modelos sean lo suficientemente slidos para resistir sus manitas, y que no haya artculos pequeos que ellos pudieran tragar. La maestra debe estar ocupada cada momento, o cantando un corito o contando una pequea historia. No importa cuntas veces usted haya tenido tiempo para contar la historia o cantar el corito, el beb nunca se cansa de orlo otra vez.

Los infantes no van a caber en ningn programa de enseanza que se use en cualquier clase de programa unificado de enseanza. Sus necesidades son nicas y, por lo tanto, no caben en un patrn que se disea para los grupos superiores. Ellos no estarn en esta clase por mucho tiempo, y pronto estarn listos para el programa de enseanza regular.

Los bebs no les gusta el cambio. Se sienten asustados si en cierto da hay una niera nueva; no les gusta que otra persona, aparte de su madre, les d de comer; de la misma manera no les gusta que haya nueva maestra en la clase bblica. Puesto que es una clase que consiste ms en cuidar de bebs que en ensear, es la clase que la mayora de las maestras quieren por ciclos muy cortos, pero eso derrota uno de los propsitos principales de la clase. La ventaja ms grande al tener la clase es ensear a los bebs que vayan felizmente a la clase, pero es mucho ms probable que lloren si hay cambio de maestras cada rato. Las maestras de los bebs deben darse cuenta de que hay ciertas caractersticas de los bebs que no se pueden cambiar, ya que se deben a su nivel de madurez, no porque se hayan puesto necios. Tener una rutina fija con una maestra en especfico es una de aquellas necesidades bsicas que el nio tiene.

El nmero de bebs en una clase debe ser muy limitado. Adaptarse a un grupo es difcil para el infante, de modo que, el grupo debe ser muy pequeo para que la clase funcione por completo. Ya que hay infantes que podran llorar en algn momento durante la clase, la maestra debe tener un nmero tan reducido que ella pueda cuidar de todos aun en los das ms difciles. Si usted est en una congregacin con algunos bebs, podra ser necesario tener ms de una clase de infantes, pero de esa manera estn ocupando ms adultos y sacndolos de clases donde ellos podran estar aprendiendo informacin que necesitarn despus; por eso, estudie la situacin con cuidado. Podra ser mejor fijar cierto lmite de edad para los que asistan a la clase, para que haya menos nios involucrados.

Si, por el otro lado, usted est en una congregacin ms pequea donde en este momento hay slo un infante, entonces deje que su madre trabaje da con da con l en casa, y no saquen a algn adulto de su propia clase para que ensee a un solo beb. Deje que l espere un poco ms de tiempo hasta que pueda adaptarse a la primera clase preescolar que ya existe. De cualquier manera en este perodo de la vida del beb, la madre es la maestra ms efectiva; as que, usted no est privando al nio de su desarrollo espiritual al requerir que espere un tiempo corto.

Me temo que una de las razones por la cual algunas madres quieren que sus bebs estn en clases tan pronto como sea posible es para aliviarse ellas mismas de la responsabilidad de cuidar de ellos por una hora. Las madres de todo lugar les gusta que alguien ms cuide a sus bebs por perodos breves de vez en cuando, pero los servicios de la iglesia no han sido diseados para que usted tenga un tiempo libre sin su beb. Los bebs causan muchos problemas, pero consideren los placeres recibidos de tenerlos y traten de disfrutar a su beb. Es cierto que ustedes estn sacrificando algunos meses y aos en los que podran estar escuchando y disfrutando su propia clase bblica, pero este perodo pasar rpidamente. Otras hermanas ya han tenido (o tendrn en el futuro) su turno para tener un beb sobre su regazo. Este nio es de usted y este es su turno. Considrelo como un privilegio y una bendicin, en lugar de como una labor pesada o aburrida.


Nios de dos y de tres aos

 

La capacidad del nio de dos aos para prestar atencin es muy limitada. Todava aprende mejor por medio de la enseanza privada. Acaba de descubrir que l es un individuo distinto y no la extensin de su madre y, por lo tanto, tiene la tendencia de ser muy egosta. Resiste toda instruccin. Su primera reaccin a toda pregunta es No! aun cuando la pregunta es, Quieres una galleta? Compartir y cooperar simplemente no encajan en su estilo de vida. Apenas comienza a ir al bao. Todava es beb, y llora fcilmente, lo cual significa que no har bien su trabajo el da que tenga demasiado sueo o que es demasiado malhumorado para ser feliz. Est aprendiendo a hablar usando primero frases, y luego prrafos. No podr responder verbalmente excepto a un nivel muy sencillo. Todava responde mejor a la actividad de cantar coritos, porque l ahora puede imitar acciones fcilmente, pero todava tiene problemas si quiere imitar palabras, mayormente si usted le pide que repita una palabra que usted ya dijo hace ms de un minuto! El entiende la instruccin de sintate y qudate sentado, pero no entiende el porqu de su demanda. Casi dondequiera que vaya se le permite que se mueva libremente. El est acostumbrado a investigar a su entorno a su antojo, no en algn orden prescrito que algn adulto haya fijado. Si no le han hablado y ledo regularmente, l no habr aprendido a prestar atencin. La voz de usted como maestra podra no dejar ms impresin sobre l que la televisin que se ha dejado prendida como ruido de trasfondo. A esta edad l est aprendiendo ms rpido que en cualquier otro perodo de su vida, cmo usar el tenedor, cmo vestir la camisa, cmo es una mariposa, pero sentarse en una sala de clases para escuchar ideas abstractas? No ser nada fcil, as que, Buena suerte con l!

El nio de tres aos ha hecho progreso rpido desde que cumpli dos aos. Ya pas la etapa de slo decir No, y est mucho ms dispuesto a cooperar con el grupo. Habla ahora con fluidez. De hecho, podra parecer que a la mitad de su lengua tuviera una bisagra, pues pareciera hablar lo doble. Ha descubierto las palabras Por qu? y las usa sin cesar, aunque no tenga la madurez suficiente para entender bien las respuestas. Su capacidad para prestar atencin todava est muy limitada, pero puede prestar fcilmente atencin a las historias cortas. Las historias todava tienen que ser relatadas con frases sencillas, pero, por lo general, l puede responder preguntas que se hacen sobre los puntos principales. A estas alturas l probablemente tendr un buen repertorio de coritos que pueda cantar. Todava llora fcilmente, pero no es tan propenso a ser malhumorado y molesto como lo era el ao pasado. Si usted tiene una clase de nios de dos y de tres aos de edad, las mejores respuestas probablemente vendrn del nio mayor de la clase, porque su capacidad para responder ha alcanzado el nivel de madurez requerido. Observar a un nio de tres aos bien instruido da mucha alegra. Probablemente el nio de tres aos est dispuesto a desempear un papel cuando se le pide, ms que cuando tena dos aos. Ha descubierto que los adultos sonren y lo alaban cuando contesta sus preguntas.

Casi todos los nios pasan por una etapa de tener miedo de ir a la clase. Los temores nuevos son parte del proceso de madurar. No presione al nio. Probablemente no hay explicacin lgica de su nuevo temor, porque los temores no son lgicos para los de esta edad. Podra haber ido a la clase por unos meses antes de que el temor surgiera, y no es probable que algo haya sucedido en la clase misma que provocara tal temor. Si la familia se ha mudado a una casa diferente, el nio podra reaccionar no queriendo ir a la clase. Si su mam tiene un nuevo beb, entonces el nio de dos aos podra rehusar dejar su lado por algn tiempo. Si l ha estado enfermo por algn tiempo y ha perdido una que otra clase, el saln de clases podra parecerle un lugar espantoso la primera vez que vuelva. O, si Mam comienza a ensear otra clase, especialmente si Hermano Mayor est en aquella clase, entonces el Nio Pequeo podra decidir que algo muy emocionante est sucediendo en aquel saln, y l est muy descontento en su propio saln.

Deje que el nio se quede con su madre por unas semanas, aun cuando esto significara una asistencia a una clase de nios ms grandes. El necesita descubrir por s mismo que la clase de nios mayores no se adapta a su nivel de madurez como su propia clase. Estos todava sonbebs, y la fase pasar pronto. La maestra podra tener que asegurar a la madre que es una decisin sabia que l pierda la clase por un tiempo, porque probablemente la maestra ha tenido ms experiencia que la madre en ver a los diferentes nios que pasan por esta fase. La fase pasar rpidamente y el nio estar dispuesto a volver felizmente a su clase. La fase pasar ms rpidamente si no ha habido trauma causado por pleitos sobre si debera ir a la clase o no.

Este grupo podra o no, ser capaz de unirse al resto de la congregacin en su programa de enseanza. Esta edadtieneque tener historias en lugar de principios, de manera que el unir este grupo a los dems depende de lo que se estudie en las otras clases. Si estn estudiando las epstolas, vuelva a la historia del pueblo de Dios para esta clase. Escoja ciertas historias que ellos puedan entender, y contarlas en orden. Habr suficiente tiempo para que aprendan las lecciones de las epstolas, cuando tengan la edad suficiente para entender lo que estn estudiando. Sin embargo, si las otras clases estn estudiando la historia bblica, hay historias de cada seccin de la historia general que estos pequeos pueden aprender. Revise la unidad de estudio y escoja las historias principales y cuntelas en secuencia. Usted podra estar sorprendida al darse cuenta de cual les gusta ms. Todava contar muy pocas historias durante su trimestre y contar esas historias una y otra vez.

Los nios de dos y de tres aos se unen bien en una clase. Aunque el de tres aos est respondiendo mucho mejor verbalmente, no est tan adelantado para que el de dos aos se sienta frustrado con l. Pero el de tres aos estar mucho ms adelantado que el de un ao para que estn juntos en la misma clase. Los dos simplemente no aprenden de la misma manera. El de tres aos estar terriblemente aburrido y se comportar mal mientras usted trabaje con el infante. Haga cualquier divisin necesaria para evitar que haya nios de tan diferentes edades en un solo grupo.


Los de cuatro aos y los de cinco aos

 

El nio de cuatro aos es inquieto. Est creciendo muy rpidamente este ao. Tiene ms energa de la que realmente ocupa, hasta le llega el tiempo de la siesta, cuando cae dormido de cansancio. Ahora entiende cuando le dice sintate, pero noquiereobedecer porque tiene tantas cosas que quiere hacer. En nuestra sociedad moderna, el preescolar ha tenido comnmente por lo menos algo de experiencia en una guardera; as que, por lo general el nio de cuatro aos ya ha tenido alguna experiencia de lo que significa trabajar en un grupo. Est acostumbrado a que le den instrucciones que debe seguir (aunque no quiera obedecerlas). Ya hay diferencias grandes entre los nios de esta edad. Podra tener en su clase un nio que nunca se ha permitido plantar sus pies sobre la tierra sucia, y otro que ya es un jugador tosco y robusto de ftbol. A estas alturas las diferencias son el resultado de la proteccin excesiva de los padres, tanto como del temperamento del nio.

El nio de cinco aos est ms calmado que cuando tena cuatro aos. Por lo general, a estas alturas estar estudiando en el jardn de nios. Su capacidad para prestar atencin todava es muy limitada, pero est acostumbrado a que se le den tareas sencillas que debe terminar dentro de un prescrito perodo de tiempo. Una clase de treinta minutos no le parece tan larga al nio de cinco aos, ni a su maestra, como cuando l tena dos aos. El tiene ganas de leer, y probablemente entiende algunas palabras. Posiblemente puede escribir su nombre. Con facilidad reconoce las letras y los nmeros, aunque la cantidad del nmero tiene muy poco significado para l. El aprendizaje es divertido para l, y casi no hay lmite de lo que pueda aprender con tal que se le presente segn su nivel de comprensin. El de cinco aos quiere complacer a los adultos que le rodean y, por lo tanto, responde de manera hermosa a una maestra que le agrade.

Hay una diferencia enorme entre el nivel de madurez del nio de dos aos y el de cinco. De hecho, la diferencia entre el nio de dos aos y el mismo nio ya de cinco aos es mayor que la diferencia entre cualesquier otros tres aos durante su ciclo de crecimiento; por eso, los nios de dos aos y los de cinco aos nunca deben estar en la misma clase. Haga cualquier separacin de clases que sea necesaria para evitarlo. Los de dos aos y los de tres se adaptan juntos de buena manera, mientras los de cuatro y los de cinco se adaptan juntos. Si no hay suficientes nios para juntarlos de esta manera, ponga al de cinco aos con el de seis aos en vez de ponerlo con el de dos aos.

Los nios de esta edad todava no les gusta el cambio. Aun el de cinco aos podra asustarse si cierto da al entrar a su saln en al jardn de nios, se da cuenta de que la maestra es una maestra substituta, y l ve este saln con mucha ms frecuencia que el saln de clases bblicas. El nio de esta edad puede hacer frente a la rotacin de maestras mejor de lo que poda a la edad de dos aos, pero podra ser que todava no le guste.

 

Enseles a prestar atencin

 

Maestra, la tarea de usted es muy importante, porque estar poniendo el fundamento para todas las clases bblicas futuras. Una de las lecciones bsicas que estar enseando escmo los nios deben comportarse y cmo deben prestar atencin en una clase bblica.Es un proceso lento, pero es una lección que los niosdeben aprender. Si usted hace bien su trabajo, habr prevenido la mayor parte de los problemas disciplinarios que podran surgir en las clases superiores.

Ya que una de sus tareas bsicas es la de ensear a los nios a prestar atencin, est alerta a la reaccin decada nio en respuesta a la historia. Advirtase si hay un nio presente slo en cuerpo. Trate de corregir la tendencia ahora, ensendole a prestar atencin a lo que usted est diciendo. El prestar atencin es una habilidad muy importante. Un nio podra tener severas dificultades, si no aprende a prestar atencin antes de que cumpla la edad para entrar a la escuela. Para aprender algo efectivamente, se tiene que ser capaz de prestar atencin, de seguir direcciones, y de repetir la lección en palabras propias. Ningn aprendizaje habr ocurrido hasta que la persona haya logrado esto, no obstante su edad! Inste a que cada nio participe y responda conforme al nivel que corresponda a su madurez.

Es fcil lograr que los nios de esta edad hablen, pero probablemente tendr que ver con algo que pas anoche, o algo que hayan visto en la televisin. Ellosdebenaprender que no se platican de tales cosas durante una clase bblica. Este es el tiempo para hablar acerca de una historia bblica. Forme el concepto de la reverencia hacia Dios al mostrar respeto por Su palabra. No use palabras dulces sobre cmo nos debe gustar or acerca de Dios, sino simplemente interrumpa su cuento y con calma decirle que es tiempo para hablar acerca de nuestra historia bblica, y entonces al terminar puede contar lo que el guste.


Enseles la Biblia

 

La tarea de usted es ensear a los nios que Dios es especial y que Su palabra es especial, as que, tratamos a Dios y Su palabra de manera especial. La mejor manera de ensear estas lecciones es por medio de ensear historias bblicas sobre los hroes de la fe. Ayude a sus alumnos a ver que la gente buenasiempresirve a Dios, sin importar los obstculos que haya en el camino. Aydeles a ver que Dios siempre bendice a aquellos que lo aman y guardan Sus mandamientos. Aydeles a ver con la misma claridad que Dios siempre castiga a aquellos que desobedecen. Este es el fundamento de todo nuestro entendimiento del plan de Dios para la redencin del hombre.

Es mucho ms difcil que capten las ideas abstractas de Dios y del cielo que las historias directas acerca de la gente y sus acciones. Aunque hemos insistido en que aun los nios ms pequeos pueden aprender historias bblicas, tome un momento para pensar en cun abstracto es el concepto de la existencia y naturaleza de Dios. No lo pueden ver; no tienen el conocimiento de Dios que se adquiere gracias a la experiencia, ni ver a alguien parecido a El que sirva de ejemplo. Pero regularmente ven a la gente a su alrededor y, por eso, tienen un concepto prctico de los personajes bblicos, aunque un personaje en particular haya vivido hace muchos aos. Deje que ellos aprendan las caractersticas de Dios por medio de los ejemplos especficos de cmo Dios trat con algunos personajes bblicos. Deje que ellos aprendan cmo deben comportarse al ver cmo la gente buena de tiempo atrs se comportaba. La primera cosa que aprendern acerca de Dios es que El es un Ser todopoderoso que puede hacer obras que ninguna persona sola podra hacer. Los conceptos ms abstractos vendrn despus.

Recuerde que el cielo mismo es un concepto abstracto. Aun cuando podemos decir a nuestros hijos que el cielo es el hogar de Dios, no pueden verlo. Adems, al correr los aos, ellos descubren que algn amigo o familiar muere, va al cielo, y entonces que ese amigo no vuelve. El reconocimiento de que algn da podemos vivir en el cielo con Dios da una esperanza grande a la persona anciana que se acerca al fin de su vida, pero decir al nio pequeo que algn da Dios lo llevar al cielo slo lo desconcierta, pues probablemente ni siquiera desee estar separado de sus padres para pasar la noche con los abuelos, mucho menos para ir a aquel lugar del cual no se vuelve! Es en realidad un pensamiento alarmante para muchos nios. Deje que aprenda, a travs de muchas historias acerca de cmo Dios trata con la humanidad, que Dios es amoroso tanto como justo. Deje pasar los aos, deje que madure para comprender que la bendicin mejor que todas es el hogar en el cielo mismo con Dios, pero l ser un nio muy grande antes de que esa promesa tenga mucho significado para l.

Los nios pequeos necesitan aprender acerca del amor de Dios, pero tambin deben aprender de su justicia. Deben aprender que aunque sus padres los amen, habr castigo si desobedecen. De la misma manera, el amor de Dios hacia la humanidad no excluye el castigo de la maldad. De hecho, si el amor de Dios excluyera el castigo, entonces El no sera justo, y no sera un Ser digno de nuestra admiracin.

Recuerde nuestra lección sobre el humanismo. Se acuerda que dijimos que los humanistas no ponen objecin a que tengamos religin a nivel popular, con tal que los nicos conceptos que enseemos acerca de Dios sean referencias vagas a algn ser que nos ama? Escchese a s misma en la prxima clase de preescolares, y lea con cuidado su manual para maestros. Est usted contando una historia sobre las grandes obras de Dios y cmo ciertos personajes bblicos respondieron a sus mandamientos, o est simplemente pronunciando de manera indiferente ciertos dichos triviales acerca de cmo Dios te ama que encantaran a los humanistas? Usted no habr enseado la Biblia hasta que hayaenseado lo que la Biblia dice, y la Biblia dice mucho ms que Dios te ama.

Reflexione sobre todos los puntos que hemos presentado en este libro sobre los dichos triviales. Probablemente en esta poca, ms que en ningn otra, se le alimenta a la gente con esta clase de sentimentalismo espiritual. Es un equvoco grave pensar que los nios slo pueden aprender a compartir, a ser bondadosos, y a asistir a los servicios de la iglesia cada domingo. Deje que los padres y la maestra de del jardn de nios enseen sobre las habilidades de compartir. La historia del Buen Samaritano es mucho ms emocionante que una simple lección sobre el compartir. Los nios piensan que no pueden perder ninguno de los programas de televisin de dibujos animados sobre los sper hroes. Por qu, pues, no pueden aprender acerca de Sansn? Las historias bblicas son fascinantes. Les encantan a los nios. La idea nuestra de que a los nios no les gustaran las historias bblicas refleja falta de fe por parte nuestra. Les estamos privando de la herencia que Dios les ha dejado. Por favor, no prive a los nios que estn a su cuidado de su herencia.

Use una variedad de historias. Los nios preescolares necesitan que sus historias se digan de manera muy sencilla, pero no tienen que ser limitados a slo unos pocos personajes favoritos del Antiguo Testamento. Aman las historias sobre bebs, as que, tales historias como el Beb Moiss y el Beb Jess son especialmente apropiadas. Las historias de Jons, el Hijo Prdigo, el Buen Samaritano, Jos, No, y David son sus favoritas. Ensaye algunas historias adicionales que probablemente no hayan escuchado. Con la excepcin de con los infantes, diga sus historias en secuencia justamente como lo hara con un grupo mayor, aun cuando omita las ms difciles. Escoja una seccin en particular de la historia de la Biblia, y relate las historias principales a travs de ese perodo. Es maravilloso lo que los nios pueden aprender. No subestime su habilidad. Tenga cuidado de no omitir historias que les seran fascinantes. Los nios de cuatro o de cinco aos pueden aprender muchos, pero muchos, de los relatos de la historia cuando los presentamos de acuerdo su nivel. Ha ensayado contar en alguna clase a los de cinco aos acerca de las visiones de Ezequiel? Las encuentran fascinantes!

Por lo general la fe no es un problema para esta edad, porque los nios pequeos tienen la tendencia a creer todo lo que oyen. Es por esa razn que aman tanto la poesa infantil y los cuentos de hadas. Est perfectamente bien dejar que los nios desarrollen su imaginacin con las historias que se cuentan para divertir, pero explqueles que estas historias que tenemos en la clase bblica son muy especiales, porque en realidad ocurrieron. Mustreles en un mapa sencillo dnde cierto evento ocurri. Un nio de cinco aos no batalla para aprender a reconocer las caractersticas bsicas de un mapa. Usted est poniendo un fundamento de fe que ser de valor para l al madurar y aprender que en realidad algunas cosas que l ha odo no son ciertas.


No vaya en contra de los niveles de madurez

 

La capacidad para prestar atencin es muy limitada durante los aos preescolares. Esto es algo que los nios no pueden evitar, porque es el resultado de su nivel de madurez; por eso, no es juicioso que la maestra trate de ir en contra del proceso y regaar a los nios cuando no pueden escuchar durante una historia larga. Planifique varias actividades cortas para cada perodo de clase, teniendo cuidado de que cada actividad realce el proceso de aprendizaje en vez de ser simplemente algo para completar el tiempo o un actividad de juego. Para el nio de dos aos cinco minutos es un tiempo muy largo. Desde luego, el tiempo que duran sus actividades puede extenderse al madurar los nios.

Tenga contacto fsico muy cercano con su grupo. Si usted ensea las clase de los ms pequeos, sintese en el piso con los nios reunidos alrededor de usted. Ellos se sientan en el piso en casa, y sillas pequeas a menudo presentan una distraccin para ellos. Aun el de cinco aos est completamente cmodo sentado en el piso, al menos durante una parte del perodo. Si usted usa sillas, trate de tener el saln arreglado para que las sillas se puedan quitar con facilidad. Podra necesitar que todos los nios puedan ver hacia el frente en cierta direccin durante parte del perodo para ver una ayuda visual en particular, y despus podra querer que se den vuelta para otra actividad. El cambio de posicin a menudo fija su atencin al ir progresando en la lección. Est lista para tocar suavemente la espalda del nio cuya atencin est vagando. Ponga un brazo alrededor del ms pequeo que todava no haya aprendido a quedarse sentado durante la clase. Llame el nombre de otro que le haya vuelto la espalda. A esta edad les gusta que les acaricien, y un toque suave les volver la atencin hacia usted otra vez, mejor que cualquier otro mtodo.

Hable de manera suave al contar la historia. Ellos tienen la tendencia de responder en el mismo tono de voz que usted haya usado. Todos sabemos que a veces el nio se mete en algo peligroso y tiene que ser llamado pronto. O, sabemos que a veces los nios no se comportan bien, y tienen que ser reprendidos con firmeza. No vacile en estar firme y estricta. Prese y sea como el grande lobo malo si es necesario, pero trate de contar su historia con una voz calmada y placentera. Entre ms fuerte usted hable, los nios tendern a ser ms hiperactivos, y entre ms hiperactivos sean, ms probabilidad habr de que se comporten mal.

Permanezca muy ocupada usted misma al presentar las varias actividades. Si usted permite que sus mentes vaguen por un momento, es difcil volverlas de nuevo a la lección. Relate su historia de manera sencilla, pero tambin de manera conmovedora. Levntese de su asiento (la maestra de los preescolares necesita mucha energa!) y dramatice su historia; haga notar cada detalle. Tan pronto que termine una actividad, est lista para avanzar inmediatamente a la siguiente.


Ayudas en la enseanza

 

Este es el grupo que ms necesita las ayudas visuales. Sin embargo, es tambin el grupo que con ms probabilidad se distraer con una ayuda detallada o complicada. Si usted se da cuenta de que la ayuda visual que est usando resulta ser una distraccin en vez de una ayuda, sela slo un momento, y entonces pngala fuera de la vista de ellos por el resto de la clase (aun cuando fuera la predilecta de usted!).

Haga sus ayudas visuales muy sencillas y directas. Use cuadros sencillos. Sus historias de franelgrafo no necesitan cuadros de trasfondo de rboles, lomas, o flores. Usted necesita slo los personajes principales que llevan a cabo los actos principales de la historia, porque a estas alturas estos son los eventos que el nio puede recordar. Figuras a base de lneas dibujadas en el pizarrn funcionan bien. El dibujo de una sencilla figura de palitos del evento principal de la historia puede despertar su memoria acerca de las lecciones en esta serie de estudios. Usted podra hacer planes de usar un nuevo cuadro cada semana durante la unidad. De esa manera, los nios pueden mirar la serie de cuadros y recordar las historias de este perodo de la historia bblica.

Asegrese de que su ayuda visual est enfatizando el punto principal de la lección, no algn punto secundario e insignificante. Asegrese de que el tiempo que tendr que dedicar a la preparacin de la ayuda visual que piense usar ser justificado por el valor que tenga en el proceso de aprendizaje. La mayor parte de nosotros no tenemos tiempo extra para pasarlo en cosas de poco valor.

Tambin, asegrese de que su ayuda visual est adaptada al nivel de madurez de sus alumnos. Como hemos dicho, el infante podra tratar de morder el modelo, as que, debe ser lo suficiente macizo para resistir sus pequeos dientes.Lpices y colores de cera son una distraccin durante la clase bblica, porque los nios ms pequeos no pueden escribir. El nio de dos aos todava no ve ninguna relacin entre el color de cera en su mano y el diseo en el papel. Le gusta la raya bonita hecha por el color, pero le gusta la raya en la pared tanto como le gusta la raya en el papel. De hecho, podra comerse el color de cera, as que, sera mejor dejar los colores de cera guardados con los dems tiles y recursos. Si usted le da un cuadro bonito que llevar a su casa, podra empezar a morderlo antes de llegar con Mam. Las ayudas ms efectivas para ellos sern objetos que puedan manejar o cuadros que puedan ver, pero no pginas para que las pinten. A esta edad los nios entienden conceptos visuales mejor que los conceptos verbales.

Aun el nio de cinco aos no puede leer y escribir ms de una que otra palabra, as que, no est listo a responder preguntas de un cuaderno de trabajo. El no puede ejecutar estas habilidades lo suficientemente bien para que sean utilizadas como herramientas para aprender su lección bblica. Yo nunca uso un cuaderno de trabajo en una clase de preescolares, porque los nios no pueden leer o escribir. Todas las actividades del libro tienen que hacerse al nivel individual, as que, las actividades del libro toman mucho tiempo, y si las comparamos, no compensan el provecho que se obtendr.

Para todos, con la excepcin de los ms pequeos, escriba en el pizarrn o en un diagrama los nombres de los personajes principales de la historia. Sus alumnos todava no leen, pero ya saben que las palabras significan algo. A menudo ellos mirarn al punto donde usted escribi el nombre al tratar de recordarlo. Usted podra ensayar combinando cuadros con nombres en tarjetas de flash o en diagramas. Tenga nuevas tarjetas de flash cada semana para los personajes ms nuevos (slo para los ms importantes) y ponerlas con las dems de la unidad. Es sorprendente cun bien el nio de cuatro aos puede recordar los personajes al ver el cuadro en la tarjeta de flash. Hemos descubierto que funciona bien que las figuras del franelgrafo sean duplicadas en una fotocopiadora para usarlas como tarjetas de flash o para hojas de actividad. Ajuste la copiadora a la marca para copias menos oscuras, y reduzca la figura al tamao que necesite. De esa manera usted tiene el cuadro de la misma figura que usaba en su presentacin, para usarla ahora como recuerdo del personaje.

Use muchos coritos. Escoja un corito que se adapte a su historia si es por todo posible. Use muchos gestos y ademanes al cantar, porque los pequeos respondern mejor en las acciones del corito que en cualquier otra forma. Los gestos se vuelven menos importantes al acercarse el nio a la edad de entrar a la escuela, pero al nio de cinco aos todava le encantan los coritos de nios con sus acciones. Si usted tiene la clase de los ms pequeos, est preparada a cantar la mayora de los coritos usted sola. El nio est escuchando antes de que pueda responder verbalmente. Usted podra sorprenderse al darse cuenta de que aun el nio de dos aos ha cantado el entero corito a Mam durante la semana. Al correr el tiempo, agregue la primera estrofa y el coro de sus himnos favoritos del servicio de adoracin. Aprenda el corito sobre los libros de la Biblia. El nio de tres aos lo puede aprender con facilidad, y cuando tenga cuatro aos, esto le preparar para aprender la lista de los libros. Asegrese de que los nios estn entendiendo las canciones que cantan (en particular, al acercarse a la edad de entrar a la escuela). De vez en cuando detngase y hable sobre el significado de alguna cancin favorita.


Repase y vuelva a repasar

 

Uno de los mtodos de repasar ms efectivos para los nios pequeos es que ellos dramaticen la historia, aun cuando ellos no entiendan la actuacin formal. Deje que la maestra diga toda la historia primero, entonces que la dramaticen juntos. En lugar de dividirles asignando a cada nio un papel especfico, deje que cada nio dramatice la entera historia. A esta edad su imaginacin es muy flexible. Ni siquiera necesitan accesorios para ser capaces de imaginar cada paso del camino a travs de la historia. Por ejemplo, si su historia es la del Beb Moiss, deje que cada nio se haga Jocabed teniendo en los brazos al nio recin nacido a quien ama. Aydeles a sentir tristes al ver a su nio (slo un beb imaginario ni siquiera una mueca), dndose cuenta de que el rey ha requerido su muerte. Entonces, cada uno de ustedes, haga como si hicieran una cestilla para su beb. Juntos, pongan su beb en el ro. Ahora hgase María y escndese para vigilar su hermanito. En seguida, hgase la hija del rey yendo al ro para baarse, etc. A los nios preescolares no se les dificulta cambiar de papel en sus propias mentes, pero se les dificulta grandemente observar a otro desempeando un papel y entonces respondiendo en el momento correcto con su propia parte.

Es ms difcil para los nios recordar nombres que eventos, as que, ensee los nombres con mucha repeticin. Ellos aprenden listas de nombres con ms facilidad que los nombres individuales. Tal vez sea el ritmo de la lista que les ayude a grabarla en la memoria. Por eso, tome el tiempo necesario para ensear la lista que encaje con su unidad de estudio, tales como los apstoles, los hijos de Jacob, los das de la creacin, los jueces, etc. No dude en cuanto a ensear una lista de nombres a los nios ms pequeos. Es maravilloso lo que un nio de tres aos puede aprender. Al repasar usted tendr que darle el primer nombre de cada lista para ayudarle a reconocer cul de las listas usted quiere, pero entonces l no tendr dificultad en recordarla. Una de las mejores maneras de completar el tiempo que disponga es repasar listas aprendidas en las unidades anteriores. Cada lista debe ser repasada frecuentemente.

Asegrese de incluir los libros de la Biblia en su repertorio. Deje que los de dos y los de tres aos empiecen aprendiendo el corito de nombrar los libros de la Biblia; entonces, al madurar un poco, deje que aprendan los libros del Nuevo Testamento, y, por ltimo, todos los 66 libros de la Biblia. Todava no pueden leer sus Biblias, pero usted estar poniendo el fundamento para el verdadero estudio bblico.

La repeticin es para todos, de cualquier edad, el medio ms efectivo para aprender, y es absolutamente necesario para los preescolares. Usted no habr logrado su propsito de ensear hasta que haya contado la historia el nmero de veces necesario para grabarla en la memoria de su aprendiz.

 

 

 


Un lugar para artculos extras

 

Puesto que esta es la edad ms fcilmente distrada, y tambin la edad ms inclinada a llevar un juguete a la clase, asegrese de tener un lugar designado para todos los objetos extras que se traigan a la clase. Nunca haga acepcin. Todos los juguetes, todas las carteritas, todas las Biblias, todas las cosas extras aun el chupete! se quedan en el designado lugar hasta que la clase termine. Su capacidad para prestar atencin es demasiada limitada para que se permitan distracciones en las manos del nio.

Padres, estn alerta a lo que su nio est llevando a la sale de clases. La maestra de kindergarten dispone de tiempo para la sesin en que el nio hable acerca de algn objeto que haya trado a la clase, pero la maestra de la clase bblica no dispone de tiempo para esto. Ustedes podran permitir que su hijo traiga un juguete favorito consigo al servicio, pero si lo hace, por favor, qudense con ese juguete mientras el nio vaya a su clase. Qudense con la carterita de Susana. Revisen bolsillos para ver qu se haya trado de contrabando. Recuerden que aun Biblias son distracciones si el nio es demasiado joven para leer. La clase se ha diseado con cuidado para el grupo de la edad de su hijo, as que, eso significa que lpuedeydebeaprender el material que se presentar. La maestra de su hijo ha trabajado con empeo para tener buen material que presentar. Por favor, hagan su parte para ayudar a su hijo a estar listo a prestar atencin.


Trabajar como grupo

 

Las clases para los preescolarestienen queser pequeas para que la maestra haga su trabajo efectivamente. Se ha dicho que si usted quiere que su hijo disfrute una fiesta de cumpleaos, invite al nmero de amigos que l tiene aos de edad. Lo mismo se podra decir con respecto a la clase bblica, porque hacer frente a un grupo es una tarea compleja. El beb aprende mejor si recibe atencin individual. Paulatinamente l aprende a adaptarse a un grupo y aprender, a pesar de las distracciones de otros en la sala. Despus, al madurar, aprender no slo de su maestra, sino tambin del ejemplo de sus compaeros de clase. Aun en las guarderas, en las que forzosamente los nios se mezclan con otros a una edad temprana, dos nios pequeos tienden a jugar lado a lado, cada uno con su propia idea acerca del juego. No comparten ideas, as que, cada nio en la clase de nios pequeos estar respondiendo como si l y la maestra fueran los nicos en el saln. Si ella tiene cinco nios, entonces, en realidad, ella estar tratando de sincronizar cinco clases separadas a la vez. Aos tendrn que pasar antes de que los nios puedan discutir ideas y aprender lecciones abstractas el uno del otro.

Maestras de equipo pueden ayudar en las clases preescolares. Esta es la edad cuando hay ms interrupciones para ir al bao. Es la edad cuando cada actividad requiere la ayuda individual. Es la edad en la cual con ms probabilidad habr un nio infeliz que tendr que ser llevado a su madre. (Y no vacile en volver al nio infeliz a su madre si no puede ser consolado pronto. Probablemente estar ms feliz la prxima vez, y podr venir a la clase felizmente. No permita que l trastorne la clase de hoy por ser de mal humor. Estos todava son bebs.) Ya que su capacidad para prestar atencin es limitada, a veces es bueno que una maestra relate la historia y que la otra presente la actividad de repaso. Sin embargo, tambin es la edad que est ms fcilmente distrada por la presencia de otras personas en el saln. No hay regla que se pueda aplicar perfectamente a todo grupo. Si hay pocos nios en la clase, y si se pueden controlar, probablemente una buena maestra puede trabajar ms efectivamente que dos. Pero, si un nio nuevo empieza a asistir a la clase, una maestra adicional podra necesitarse para ayudar al nuevo para que aprenda a adaptarse a la rutina de la clase. Use el mtodo que sea ms efectivo para la enseanza de la historia bblica en este momento preciso. Si le ayuda una maestra de equipo, asegrese de que ella recuerde todas las reglas que mencionamos en un captulo anterior. Esimportanteque ella permanezca absolutamente quieta y callada mientras usted presente la historia o se ocupe en otra actividad, durante lo cual usted quiere la atencin perfecta del nio.

Algunos nios son lentos en soltar a sus padres, y algunos padres son lentos en soltar a sus hijos. Si usted es la maestra de una de las clases de los ms jvenes, est preparada para que ocasionalmente una madre se sienta en su sala. A veces un nio estar asustada de una experiencia nueva, y la presencia de su madre hace ms suave la transicin del regazo de la madre al saln de clases. En tales casos, madres y maestras hacen lo que sea necesario. Pero, madres, dense cuenta de que su presencia en el saln es una distraccin para los otros nios. La maestra no puede hacer su mejor trabajo con otra adulta en la sala. Por lo tanto, si su nio no est feliz sin usted despus de un par de veces, entonces llvelo consigo a su clase y espere unas pocas semanas antes de ensayarlo otra vez. El no estar feliz en el grupo, y separado de su madre, hasta que su propio reloj de madurez diga que est listo, sin importar lo que el calendario diga. Resistir el nivel de madurez nunca vale la pena.

Maestras, recuerden que su responsabilidad tiene que ver con los nios a su cuidado. Usted no puede lograr su propsito con respecto a ellos al conversar con otra adulta. No haga caso de la madre visitante durante la clase misma. Cuando usted vea que el nuevo nio est unindose felizmente con el grupo, con tacto sugiera que la madre ensaye dejndolo solo. Si usted no puede hacer frente a que una madre le escuche ensear ocasionalmente, entonces no ensee el grupo de esta edad. A esta edad las madres y los bebs estn conectados muy cercanamente.


UN PLAN DE LECCION PROPUESTO

 

1) Empiece con un repaso rpido de la lección de la semana pasada, mayormente si sus historias estn en secuencia como lo deben estar. Repase la unidad entera de estudio solamente lo suficiente para mostrar la conexin entre las historias anteriores y el nuevo material para la clase actual. Entienda que usted har la mayor parte del repaso, los nios dandoalgunasrespuestas a sus preguntas sencillas.

 

2) Relate la nueva historia para la lección presente, usando sus ayudas visuales. Tal vez fuera bueno contar la historia dos veces, usando las mismas palabras lo ms que le sea posible. Haga que la historia sea breve, usando frases sencillas. Para los nios ms pequeos incluya slo los detalles principales sobre los personajes principales. Al madurar los nios, agregue ms detalles, pero todava dedquese a la lnea principal de la historia. Recuerde que la historia que usted contar es la razn principal por la cual se han reunido, as que, siempre busque maneras de presentarla ms efectivamente. Tal vez fuera bueno decir parte de la historia, detenerse y repase esa parte, avanzar a otra parte de la sala y decir otra porcin, y luego repasar las dos partes. No importa la edad del grupo que est enseando, asegrese de que est enfatizando la lección queDiostuvo en mente cuando El determin incluir esta historia en nuestra Biblia. Cualquier otra cosa es unuso incorrectodel pasaje.

 

3) Si usted est guardando un dibujo de figura de palito para ilustrar cada historia en la unidad, agregue su nuevo cuadro y explique cmo la lección actual encaja en la secuencia. Muestre cmo la unidad formula una historia continua. Introduzca nuevas tarjetas de flash mostrando los nuevos personajes de la historia de la lección presente. Repase los otros cuadros y/o tarjetas de flash.

 

4) Cante una cancin sobre la historia, estando segura de que los nios entiendan la cancin y cmo se aplica a la lección.

 

5) Repase ms de una vez la historia de la lección actual. La repeticin es la nica manera de aprender para los de cualquier edad, pero en particular para los ms pequeos. Insista en que respondan, aun con los de dos aos (aun si usted tiene que hacer la pregunta, dar la respuesta en palabras sencillas, y luego decirles que repitan su respuesta). Si algn nio no responde preguntas voluntariamente, llmele por nombre. Trate de estar segura de que es una pregunta de la cual l sabr la respuesta. Repita la pregunta, usando otras palabras, o cambie mtodos hasta que usted encuentre uno al cual puedan responder.

 

6) Deje que los nios repitan la historia, usando la ayuda visual. Deje que la presenten por actuacin. Haga el plan de variar el tipo de actividades de repaso de una semana a otra, para que los nios no sepan qu esperar, y no caigan en una rutina aburrida. Al repasar est segura de fijarse en cualquier concepto incorrecto acerca de la lección que se tenga, y corrjalos.

 

7) Si los nios tienen por lo menos cuatro o cinco aos, podra ensayar ensendoles un versculo corto que memorizar que encaje en la historia. Aprndanlo juntos en la clase. Son demasiado jvenes para tareas fuera de la clase, excepto cuando los padres les ayuden a repasar lo que usted les haya enseado. Est segura de que ellos entiendan el versculo, y cmo ste encaja en la historia. Si estn estudiando juntos una lista de nombres, agregue la nueva de la historia actual, y practiquen juntos toda la lista, ms de una vez.

 

8) Canten la cancin acerca de su historia otra vez. Tal vez podra agregar otra cancin o dos como cambio de rutina. A esta edad se puede dejar que las nias pequeas dirijan tan libremente como los nios pequeos, porque les faltan aos todava para aprender que los hombres jvenes dirigen en la obra pblica.

 

9) Practiquen la recitacin de los libros de la Biblia. Canten el corito nombrando los libros, nmbrenlos todos juntos, aprendan cuatro nombres nuevos si apenas estn empezando, etc. Si estn acercndose a la edad de entrar a la escuela, ensaye pasando por la fila dejando que cada nio nombre el siguiente libro en orden.No es juicioso dejar que un nio se ponga de pie para nombrarlos todos, porque los dems no estarn ocupados y estarn inquietos. Esta es una rea en la cual una maestra de equipo podra ayudar. Una maestra podra estar trabajando con el grupo nombrando o cantando los libros juntos, mientras que la otra maestra est a un lado de la sala, ayudando a un muchacho a nombrarlos l solo.

 

10) Repase una historia de las que han estudiado en tiempo pasado, tal vez una de las favoritas. O, usted podra decir a un nio que escogiera uno de los cuadros de la unidad que usted ha pegado en la pared y decirle de qu se trata. Entonces el siguiente en la fila podra escoger otro, etc. Si la respuesta es buena, repase otra historia de las que ya han estudiado. Tal vez podran cantar una cancin acerca de una de esas historias. Ahora sera tiempo oportuno para repasar las listas de una unidad anterior.

 

11) Antes de dejar la clase, repase la historia actual por ltima vez para estar segura de que est puesta firmemente en la mente de cada uno. Como cambio de paso, podra leer la misma historia que les haya enseado de un libro de historias bblicas, para que el material se les presente una vez ms.

 

12) Si todava hay tiempo disponible, deje que los nios turnen dirigiendo sus canciones favoritas.

 

Observe el frecuente cambio de actividad. Sin embargo, la historia actual fue contada una y otra vez. No ha habido un solo momento para jugar. Cada momento se llen con valor espiritual. Sea creativa en pensar de maneras de presentar su historia, para ilustrar su lección con ayudas visuales, y para repasar su historia, y su unidad. Si usted quiere que los nios lleven algo a la casa, entonces tenga un bosquejo sencillo o historia escritos de la lección actual, o tal vez una copia del dibujo de las figuras de palito que usted puso en la tabla. Incluya el versculo a memorizar que usted ha usado o la lista de nombres que est construyendo. Sugiera que los padres se enteren de las historias que usted est presentando, y que las repasen en el hogar. Si usted est enviando a su casa cada vez una historia sencilla, o dibujo, sugiera que los padres los guarden todos en un cuaderno para usarlos como fuente de material que usar en los repasos en el hogar. Pida la ayuda de los padres en la obra de memorizar textos. Juntos los padres y maestros pueden poner un fundamento slido de fe y de conocimiento bblico aun antes de que el nio entre a la escuela. Si es as, el nio ya habr comenzado bien en su camino hacia el cielo.

Maestras de los preescolares, no olviden su propsito. Usted es una maestra de la Biblia, no una niera asalariada. Usted est ayudando a los padres a poner un fundamento de amor y respeto para el Dios del cielo. Usted ha de estar enseando las grandes obras de Dios en un vocabulario que estos nios pequeos pueden entender. Ellos pueden aprender una cantidad maravillosa de informacin. Ellos pueden aprender los hechos de una historia con la misma facilidad con la que pueden aprender a repetir con indiferencia dichos triviales. Es la tarea importante de usted llenarlos hasta su capacidad con historias sencillas; por lo tanto, tmela en serio.

 

Tarea:

Redacte un plan de lección para nios de cuatro aos. Prepare una ayuda visual que mostrar con la nueva historia, y otra para que los nios la usen para repasar (tal como tarjetas de flash). Asegrese de que el nivel de dificultad sea correcto.

 

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