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“No somos un ministerio grande, pero sí somos un gran ministerio”

Amar a Dios de verdad

Amar a Dios de verdad

Y amars a Jehov tu Dios con todo tu corazn, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
(Deuteronomio 6:5)

Nuestro amor por Dios no debe ser superficial o de la boca para afuera. Amar a Dios de verdad es ms que un sentimiento pasajero. Es una entrega total, una devocin sincera y un compromiso diario. Amar a Dios con todo nuestro ser es algo muy profundo que influye en todas las reas de nuestra vida.

Cuando amamos a Dios con todo nuestro corazn, pasamos tiempo con l en oracin y buscamos conocerlo a travs de su Palabra. Ese gran amor nos llena de confianza y nos permite poner a Dios primero en cada rea de nuestra vida, rindiendo el control de todo a l.

El amor nuestro por Dios tambin es evidente en la forma en la que amamos a nuestro prjimo como a nosotros mismos: nuestras acciones reflejan ese amor. Por lo tanto, amar a Dios no nos transforma solo a nosotros, sino que tambin influye en nuestra relacin con los dems.

Amar a Dios de verdad es reconocer su gracia y misericordia, es vivir en constante gratitud. Es confiar en sus planes y propsitos, incluso cuando no entendemos. Es obedecerlo aun cuando el camino parece difcil. Es adorarlo con todo tu corazn, alma y mente. Busquemos que nuestro amor por l sea genuino y transformador, para que el mundo vea y glorifique a nuestro Padre celestial.

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