1. ¡Un Tesoro Llamado Amistad! (15 minutos)
¡Hola, campeones y campeonas! Hoy vamos a hablar de algo que hace que nuestra vida sea más divertida y más feliz: ¡las amistades! ¿Saben qué es la amistad? Es como tener un tesoro muy valioso, ¡y ese tesoro son nuestros amigos!
En la Biblia, en Proverbios 17:17 (TLA), dice algo hermoso: “En todo tiempo ama el amigo; para ayudar en la adversidad nació el hermano.” ¡Esto nos enseña que los verdaderos amigos están con nosotros siempre, en los momentos buenos y en los no tan buenos! Son como hermanos que elegimos.
Actividad: Mi Mejor Amigo Imaginario
- Materiales: Hojas de papel, lápices de colores o crayones.
- Instrucciones: Cierren los ojos por un momento y piensen en el mejor amigo que puedan imaginar. ¿Cómo es? ¿Qué les gusta hacer juntos? Ahora, dibujen a ese amigo imaginario. Puede ser una persona, un animal, ¡o hasta un superhéroe! Mientras dibujan, piensen en las cualidades que hacen a un buen amigo.
2. Lo que la Biblia nos Enseña sobre ser un Buen Amigo (20 minutos)
Ahora que dibujaron a sus amigos imaginarios, vamos a ver qué nos dice el manual más increíble del mundo, ¡la Biblia!, sobre cómo podemos ser amigos de verdad. Porque ser un buen amigo es tan importante como tener buenos amigos.
- Amar como Jesús amó: ¿Saben quién fue el mejor amigo de todos? ¡Jesús! Él siempre amó a la gente, la ayudó y la perdonó. En Juan 15:13 (TLA), Jesús dijo: “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos.” Claro, no necesitamos dar la vida literalmente, pero podemos demostrar amor siendo bondadosos, pacientes y generosos con nuestros amigos.
- Ayudar y apoyar: Un buen amigo está ahí para los demás. Si un amigo se cae, lo ayudamos a levantarse. Si está triste, lo consolamos. Si necesita ayuda con una tarea, ¡podemos ofrecerle una mano! La Biblia en Eclesiastés 4:9-10 (TLA) nos dice: “Más valen dos que uno, porque obtienen más del trabajo. Si caen, el uno levantará a su compañero. ¡Pero ay del que cae solo y no tiene quien lo levante!” ¡Esto es amistad!
- Perdonar: A veces, hasta los mejores amigos cometen errores o nos hacen sentir mal sin querer. ¿Qué hacemos entonces? ¡Perdonar! Así como Dios nos perdona, nosotros debemos perdonar a nuestros amigos. Colosenses 3:13 (TLA) nos aconseja: “Sopórtense unos a otros, y perdónense si alguno tiene queja contra otro. Así como el Señor los perdonó, perdonen también ustedes.” El perdón ayuda a que la amistad crezca fuerte.
- Decir la verdad con amor: Un buen amigo es honesto, pero siempre con cariño. Si vemos que nuestro amigo va a hacer algo que no está bien, podemos hablar con él suavemente para ayudarlo a tomar una buena decisión. Proverbios 27:6 (TLA) dice: “Las heridas de un amigo son leales; los besos de un enemigo, engañosos.” ¡A veces decir la verdad duele un poquito, pero ayuda a crecer!
Dinámica: Cadena de Palabras de Amistad
- Materiales: Ninguno.
- Instrucciones: Nos sentaremos en círculo. Yo empezaré diciendo una cualidad de un buen amigo (por ejemplo, “leal”). La persona a mi derecha dirá otra cualidad (por ejemplo, “divertido”). Seguiremos así, diciendo una cualidad de un buen amigo cada uno, hasta que ya no se les ocurran más. ¡Esto nos ayudará a recordar lo que significa ser un amigo de verdad!
3. Amistades Bíblicas: ¡Aprendiendo de los Grandes! (15 minutos)
La Biblia está llena de historias de amistades increíbles que nos inspiran:
- David y Jonatán: Ellos eran los mejores amigos, incluso cuando las cosas se pusieron difíciles. Jonatán, que era el príncipe, amó a David como a sí mismo y lo ayudó a escapar de su propio padre, el rey Saúl. ¡Su amistad era tan fuerte que no les importó la envidia o el peligro! Pueden encontrar su historia en el libro de 1 Samuel.
- Jesús y sus discípulos: Jesús tuvo muchos amigos, y sus discípulos eran muy especiales para Él. Les enseñó, los cuidó y les mostró el camino. ¡Jesús es el ejemplo perfecto de cómo ser un amigo fiel y amoroso!
Pregunta para Reflexionar: ¿Qué aprendemos de la amistad de David y Jonatán? ¿Y de Jesús con sus amigos?
4. Conclusión y Compromiso (10 minutos)
Hemos aprendido que la amistad es un regalo de Dios y que ser un buen amigo significa amar, ayudar, perdonar y decir la verdad con amor, ¡así como Jesús nos enseñó!
Oración Final: “Querido Dios, te damos gracias por nuestros amigos. Gracias por la alegría que traen a nuestras vidas. Ayúdanos a ser amigos de verdad, que aman, que ayudan, que perdonan y que siempre dicen la verdad con cariño. Queremos ser como Jesús, un amigo fiel para todos. En el nombre de Jesús, Amén.”
Desafío para la Semana: Esta semana, piensen en un amigo y hagan algo amable por él o ella. Puede ser darle un dibujo, compartir algo, escucharlo con atención o simplemente decirle “gracias por ser mi amigo”. ¡Pequeños gestos hacen grandes amistades!
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