Martn tiene doce aos y detesta ir a la escuela dominical. Asiste, pero slo porque sus padres lo obligan. Por supuesto que su comportamiento en clase refleja a leguas que en realidad no le agrada ir a la iglesia. En ocasiones, se entusiasma, como cuando es Navidad o se hacen concursos de algn tipo. Pero las actividades generales de cada domingo no le interesan lo ms mnimo. Por lo que se ve, est aprendiendo muy poco de la Biblia y la fe cristiana, pero una cosa es segura: cualquier informacin que obtenga acerca de la verdad eterna procede exclusivamente de esa nica hora de clase semanal, porque jams toma la Palabra de Dios para repasarla.
La tragedia es que Martn es un ejemplo tpico de millares de jovencitos. Sus padres son cristianos, saben que es muy necesario asistir a la escuela dominical todos los domingos por la maana, pero es evidente que ignoran que es su responsabilidad nutrir espiritualmente a su hijo en casa. Sin embargo, tienen un inters sincero en asistir a la escuela dominical y llevar a Martn.
Un maestro sabio puede hacer algo en esta situacin tan difcil. Sin duda que el primer paso sera visitar y aconsejar a los padres. Por otro lado, si toma en serio la responsabilidad de hacer que el alumno estudie en casa, podra desarrollar tareas que doblaran o triplicaran su estudio de la Palabra de Dios durante la semana.
Asimismo, el mentor debe recordar a los padres que ellos son responsables de hacer que el trabajo encargado se realice, y pedirles que ambos lo apoyen desde el principio, convirtindolos as en sus aliados. Ellos ayudaran al muchacho a preparar sus tareas durante la semana, o cuando menos supervisaran que las haga.
Ventajas.
A estas alturas, una de las ventajas ya se ha hecho obvia. Si los padres de Martn le ayudan a hacer sus tareas, tambin ellos estarn expuestos a la Palabra de Dios, por lo que el maestro estara ministrando tanto a unos como al otro. Pero esto slo se puede lograr si el maestro reconoce que no puede atender l solo a la alimentacin espiritual de su educando. Findley Edge lo dice de la siguiente manera: La iglesia no puede cumplir por s sola con la educacin cristiana.Para algunos, esta afirmacin puede parecer extremista y exagerada, pero es la verdad. Entre ms pronto se den cuenta de ello los lderes y los padres, mejor ser (Metodologa Pedaggica,que ya se mencion).
La asignacin de tareas se traduce en ms enseanza por parte de la escuela dominical porque eleva el nivel acadmico de la educacin cristiana. Si al principio usted tiene problemas haciendo que sus alumnos se entusiasmen por la idea de hacer tareas, un sistema cuidadoso de estmulos aunado al apoyo de los padres, puede hacer que se gane la batalla. Como dijimos antes, un programa bien planeado de tareas puede doblar o triplicar el tiempo de clase y todos los maestros de escuela dominical deberan ponerlo en prctica aunque slo sea por este motivo.
Sin embargo, una de las mayores ventajas de este mtodo es que relaciona lo que se aprende en el ambiente irreal de la clase con lo que sucede en la vida cotidiana. Esto significa que las tareas deben ser algo ms que slo llenar espacios en blanco o memorizar los nombres de los libros de la Biblia. Si podemos hacer que estn ntimamente ligadas con lo que vive el estudiante, le ayudaremos a poner en prctica lo que aprendi en clase.
Una ventaja adicional es que las tareas estimulan el espritu investigador de la persona, lo que a su vez puede resultar en mayor crecimiento espiritual. Si en verdad creemos que la Palabra de Dios tiene poder sobrenatural, sabemos que entre ms tiempo pase el alumno estudindola, obtendr ms bendicin de ella. Este espritu de investigacin tambin propiciar momentos especiales en que el alumno puede aprender durante la clase dominical, a medida que hace preguntas acerca de problemas que ha encontrado durante el trabajo que hizo en casa.
Desventajas.
El problema ms frecuente para hacer que los alumnos trabajen en casa se basa en la idea negativa que se tiene de las tareas, porque de alguna manera las relacionamos con la escuela secular. Hemos fallado al presentar la escuela dominical como algo muy sencillo que se puede hacer sin necesidad de esfuerzo por nuestra parte. Es muy difcil eliminar una imagen determinada, en particular cuando es negativa. Pero es indispensable que esta cambie, si es que vamos a ministrar eficazmente la Palabra de Dios a niveles aceptables de educacin en la iglesia. Tal vez tengamos que empezar muy despacio, con asignaturas sencillas y tratando de que sean lo ms interesantes que se pueda. Nunca olvidemos que este mtodo es de grandsima importancia para la educacin cristiana.
Tambin el tiempo es problema. Los alumnos estn ocupados en mltiples actividades y en sus estudios seculares que casi llenan todo el tiempo de que disponen para preparar la lección de escuela dominical. Por eso es bueno que los maestros llamen por telfono o visiten de vez en cuando a sus alumnos y les ofrezcan ayuda. Tambin es posible establecer un sistema de premios. Conozco a un maestro que acostumbra llamar a uno de sus alumnos cada semana, pero nadie sabe de antemano a quin va a telefonear. Si el alumno a quien llama, normalmente el jueves o viernes en la tarde ya termin su tarea, obtiene 10 puntos a su favor en el concurso que se est llevando a cabo.
Una dificultad adicional es que algunos materiales impresos no ofrecen tareas que desafan o interesan a los alumnos. Algunas veces el nivel est por debajo de su capacidad y en otras, es demasiado elevado. Es posible que estos dos problemas se den en una misma clase y con el mismo material. Esto es debido a los diferentes niveles de los estudiantes.
Es aqu donde interviene el maestro. Slo l puede aadir o variar el plan de estudios porque es quien conoce las necesidades y problemas especficos de su clase. Por supuesto que debemos usar los mejores materiales que podamos comprar, pero nunca olvidemos que como maestros, tenemos el derecho de decidir sobre lo que es mejor para nuestros discpulos.
Recomendaciones para usar eficazmente las tareas.
Al principio, permita que los alumnos participen en la selección de las tareas.Este es el proceso por medio del cual se ejerce apropiadamente la presin del grupo sobre cada uno de los alumnos. En vez de entregarles cada semana una tarea, permita que ellos expresen qu actividades son ms significativas e interesantes para ellos. Recuerde que una persona se entusiasma ms en trabajar en un proyecto cuando interviene en su planeacin.
Haga que sus tareas se relacionen con la vida real.Slgase de los estudios tradicionales subjetivos y haga que sus alumnos analicen la vida a la luz del contexto de la materia que se estudia. En captulos anteriores presentamos los mtodos que se adaptan a este tipo de tareas, como por ejemplo las entrevistas.
Siempre revise las tareasque asigne. El antiguo adagio dice que el trabajador hace lo que su jefe inspecciona, no lo que espera que haga. Esto lleva tiempo, pero si en verdad queremos tener una metodologa que incluya las tareas, vamos a tener que aceptar la responsabilidad de corregirlas. Si ignoramos el esfuerzo que el alumno hizo para preparar su clase dominical, estaremos matando su deseo de progresar en su conocimiento.
Utilice buenos mtodos de motivacin.Existen varias formas de edificar la motivacin en los alumnos y la mayora de ellas son perfectamente vlidas. Ya mencionamos la presin que ejerce el grupo; otra es la competitividad, que es una motivacin externa y que puede usarse con mucho xito en algunos niveles. Pero en realidad, lo que deseamos es edificar la motivacin interna, que hace que el alumno estudie la palabra de Dios porque sabe que es importante para su vida.
Vare la clase de tareas.Puede usar la lectura de libros afines, la investigacin, las entrevistas, hacerles preguntas, encargarles proyectos, hacer observaciones directas, preparar informes y material para paneles y debates, as como cualquier otro mtodo que haga que el discpulo estudie su Biblia durante la semana. Adems, las tareas pueden combinarse con otros mtodos de enseanza para hacer su clase ms interesante y efectiva.
Premie los esfuerzos de sus alumnos y estimleloscuando realicen algn trabajo en casa. Esto puede ser en forma verbal o con estrellas pegadas en una cartulina que darn culminacin a una competencia.
Permtame insistir una vez ms en que todo el trabajo de los alumnos ser intil si el maestro no trata cuidadosa y deliberadamente de involucrar a los padres para que cooperen con l supervisando, ayudando y acelerando el trabajo que se haga en casa. En el anlisis final, son ellos los responsables de nutrir a sus hijos en la vida cristiana. El maestro de escuela dominical solamente apoya y ayuda; es su deber hacer que los padres reconozcan esta responsabilidad y acten en consecuencia.
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