William Claude Duckenfiel, un actor cómico estadounidense, poco antes de su muerte, recibió la visita de un amigo que lo encontró con una Biblia en la mano. Sabiendo que era ateo, el amigo le preguntó: “¿Qué estás haciendo con una Biblia en la mano?” Estoy buscando errores”.

Muchas personas pasan sus vidas tratando de encontrar fallas en la Palabra de Dios. Sería bueno si buscaran las verdades, las enseñanzas, la fuente de bendiciones que Dios dejó para todos en las Escrituras.

Nosotros, los cristianos, que hemos recibido al Señor en nuestro corazón y conocemos Su Palabra, debemos aprovechar cada oportunidad para mostrar a aquellos que no han tenido una experiencia con Jesús, lo valiosa que es la Biblia y cómo podemos disfrutar de sus enseñanzas. En cualquier situación, ante la dificultad más dura, siempre encontraremos un bálsamo para nuestro confort, para nuestro deleite, para nuestro crecimiento espiritual.

Cuando estamos angustiados, afligidos, sin valor, solo un poco de tiempo escuchando a Dios a través de la Palabra para que todo se transforme, para que encontremos la paz y la alegría que tanto necesitamos.

¿También busca errores en la Biblia o bendiciones para su vida?

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