ALGO HUELE MAL leccion de objeto

ALGO HUELE MAL

 

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(Lea 2 Corintios 6:14-18)

 

“Vamos Ángela, trátalo”, le dijo Carol intentando convencerla, mientras tomaba una bocanada del cigarrillo que Jane le había pasado a ella.

Ángela movió negativamente su cabeza. “No, gracias”. Ella sabía que el fumar era dañino a su cuerpo y que no le agradaba a Dios, pero no dijo nada en cuanto a esto. Carol y Jane eran populares en el colegio, y Ángela estaba emocionada de ser considerada parte de su grupo.

Más tarde, Ángela llevó su mano a su nariz, mientras entraba a la cocina de sus abuelos. “¿Qué es ese olor tan terrible?”, quería saber ella.

“¿Olor?”, le preguntó la abuela mientras se sentaba a la mesa de la cocina. Oh, seguro que estás oliendo el sauerkraut, que servimos en el almuerzo. Tiene un fuerte olor, pero nos hemos acostumbrado tanto a él que ya no lo olemos”.

“¿Qué es el sauerkraut?”, preguntó Angela.

“Sauerkraut es una palabra alemana que significa `col agria’, le contestó la abuela.

“¡Huele horrible!”, declaró Angela. “Creo que necesito un prendedor de ropa para mi nariz”.

El abuelo se rió. Luego añadió pensativo: “Me recuerda al pecado, Angela. Al principio que somos salvos, a menudo estamos muy conscientes del pecado, es como si pudiéramos “oler” lo horrible que es. Pero si nos quedamos alrededor de él lo suficiente, nos acostumbramos al “olor”, y nos deja de molestar”.

“Y otra cosa”, añadió la abuela, “el olor del sauerkraut puede penetrar nuestra ropa, y penetra mis manos cuando lo estoy preparando. El pecado es igual. El “mal olor” del pecado puede pegársenos, si estamos alrededor de él lo suficiente”.

Angela recordó de pronto que en ocasiones, sin quererlo, ella decía una mala palabra que había escuchado a sus amigas decir. ¿Podría esto ser un pecado que ella ya no podía `oler’? ¿Un pecado que había penetrado en ella? De hecho, Carol y Jane hacían unas cuantas cosas que Angela sabía que estaban mal hechas. Quizás el estar alrededor de ellas le estaba amortiguando su sentido del “olfato”. El ser parte de su grupo, podría ser algo no tan bueno después de todo.

 

¿QUÉ TAL TÚ?

¿Tienes amistades que están haciendo cosas que sabes que están mal hechas? Quizás te encuentras a ti mismo haciendo esas mismas cosas para que te acepten. Si ese es el caso, quizás debieras reconsiderar a quiénes debieras tener como amigos cercanos.

 

MEMORIZAR:

“No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas?”

2 Corintios 6:14

¡El pecado huele mal!

 

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